Nicaragua no sale de las tensiones diplomáticas en el Sistema de Integración Centroamericana, protagonizadas por el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Ayer, el régimen protestó enérgicamente contra los gobiernos de Guatemala, Costa Rica, República Dominicana y Panamá, a quienes acusó de llevar a cabo una «ofensiva injerencia sin cabida» y calificó de «servilistas» por no respaldar su terna para la elección del Secretario General del Sica.
En una carta de protesta, Ortega y Murillo manifestaron: «El Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional reitera su más enérgica protesta por la actitud insolente e irrespetuosa de estos gobiernos, que desconocen la independencia y soberanía de nuestros países, en evidente servilismo a intereses extra regionales.»
Esta reacción se da tras la suspensión de la reunión del consejo de ministros del Sica, prevista para ayer 5 de diciembre, debido a la insistencia del régimen en nominar a Denis Moncada Colindres, la diputada sandinista Arling Patricia Alonso Gómez, y la ministra Johanna Vanessa Flores Jiménez para ocupar la Secretaría General del organismo.