El Consejo Nacional de Universidades (CNU), brazo represor de la dictadura en la educación superior en Nicaragua, fue despojado de un 56% de su partida presupuestaria en 2024. La reducción supuestamente obedece a un intento de cumplir la “gratuidad” de la educación que el dictador Daniel Ortega prometió en noviembre de 2023. Sin embargo, solamente cuatro de las cinco “nuevas” universidades recibirá una subvención, y dos de ellas obtendrán menos del monto que recibían en los campus anteriores.
El CNU pasó de tener un presupuesto de 866 millones de córdobas en 2023 a operar con solamente 384 millones, según revela el informe de ejecución presupuestaria del primer trimestre de 2024, recién publicado por el Ministerio de Hacienda y Crédito Público (MHCP).
La drástica reducción presupuestaria solo alcanzó para cubrir a cuatro de las cinco “nuevas” universidades que instaló la dictadura en los campus confiscados a las universidades canceladas.
“Para el año 2024 las universidades públicas, comunitarias e interculturales de nuestro país, que atenderán a 180 220 estudiantes (…), ingresarán de manera gratuita a nuestras universidades”, prometió la dictadura.
Sin embargo, el presupuesto 2024 omite sin explicaciones a la Universidad Nacional Padre Gaspar García Laviana, creada en marzo de 2023, en León, para reubicar a los estudiantes de las canceladas y confiscadas Universidad Juan Pablo II y Universidad Cristiana Autónoma de Nicaragua (UCAN), entre otras.