Monseñor Rolando Álvarez recogió esta semana su premio Libertas Internacional en Oviedo, la capital de Asturias (España) que le había sido otorgado el 29 de mayo. El obispo retoma poco a poco su agenda pública y se deja ver después del destierro impuesto por la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
La visita del obispo nicaragüense ha sido “de carácter privado”, informó el Arzobispado de Oviedo. El premio que le había otorgado la Sociedad Civil había sido recogido por monseñor Jesús Sanz, con quien finalmente se encontró esta semana.
Al recoger el galardón, el obispo español había manifestado que el objeto principal por el cual el monseñor Álvarez se hacía merecedor del mismo era la persecución que había sufrido a partir de 2022, que acabó con su detención el 19 de agosto de ese mismo año.
“Fue acusado de traidor a la patria y le despojaron de su nacionalidad, suspendiéndole de sus derechos ciudadanos de por vida, condenándole a un total de 26 años y 4 meses de prisión por el delito de propagación de noticias falsas y desacato a la autoridad, junto a una importante sanción económica”, recordó el arzobispo de Oviedo.
Durante su estancia en Oviedo, el obispo de Matagalpa visitó el Palacio Arzobispal y el Santuario de Covadonga, según las fotografías compartidas en redes sociales.